Hombre muerde a perro

¿Se acuerdan del videoclip con el que estrené este blog hace casi un año? Pues hoy les traigo la edición ‘la puta realidad’ de uno de esos festivales de ultraviolencia neanderthal que tienen lugar a diario en toda Europa, filmado estas pasadas Navidades en un autobús de línea parisino:

El vídeo, tal y como indica la fuente, ya ha sido suprimido de páginas como Dailymotion, Youtube y otras de esas plataformas que, según los gurús de la Sociedad de la Información, democratizan Internet, con el argumento de que su exhibición constituye, en sí misma, un acto de racismo… contra los negros y magrebíes que linchan y atracan a los viajeros del autobús. Es otro ejemplo palmario de la más que habitual aplicación arbitraria y torticera de lo que en términos jurídicos se llama ‘invertir la carga de la prueba’: utilizar presunciones aparentes (y, de paso, saltarse a la torera la de la inocencia), como la de la posible utilización de este documento con intenciones propagandísticas por parte de partidos y asociaciones ultraderechistas, identificados ya en el inconsciente colectivo como el MAL, así en mayúsculas y negrita, para negar la evidencia de una prueba y volcar la culpabilidad sobre el sujeto paciente o, llegando aún más lejos en la infamia, al internauta vidente, a quien se horrorice de las imágenes, a quien se identifique con las víctimas, a usted.

Medios que parecen libres e independientes de natura aplicando una censura 2.0 al servicio de la contención y la homogeneización de la sociedad. 1984 es hoy.